La columna vertebral es uno de los sistemas mejor engranados del cuerpo humano. Ella es la que garantiza el movimiento y “soporta” el peso corporal, por eso su buen funcionamiento es básico para las actividades que cada persona realiza a diario. La Organización Mundial de la Salud estima que el dolor de espalda o dolor lumbar es la segunda causa de discapacidad a escala mundial y que al menos 5.000 millones de personas requieren de algún tipo de tratamiento para superarlo. En Venezuela, se calcula que poco más del 75% de la población ha sufrido en algún momento de dolor de espalda y también de dolor de cuello.
Malas posturas al dormir, al trabajar frente al computador y largas horas en el tráfico así como una serie de factores entre los que se encuentran hábitos tabaquitos, alcohol y traumatismos cervicales, o lumbares, son las causas principales que originan en las personas los incómodos dolores de cuello y espalda, que suelen comenzar como una simple molestia pero que si no se corrige a tiempo podría transformarse en una patología más compleja.
Manuel Díaz Martínez, cirujano de columna, explica que el dolor de cuello “obedece a una respuesta de la estructura de la región cervical que provoca una contractura muscular y en casos más severos artrosis cervical, que implica el proceso de degeneración de los discos”.
En el caso del dolor lumbar, mejor conocido como lumbago, también se producen contracturas debido a la degeneración de los discos, sedentarismo y las malas posturas, entre otros factores. “Cualquier molestia o dolor de espalda debe ceder normalmente en pocas horas, o al menos al cabo de dos días mediante reposo, indicación de antiinflamatorios y modificación de hábitos posturales. Un dolor agudo debería aliviarse en 48 horas, pero en este caso es preferible acudir al especialista”, señala Díaz Martínez.
En muchos casos, destaca el especialista, los dolores que afectan a al columna vertebral son responsabilidad de los malos hábitos posturales. “Dormir con mala postura incide en ese viaje al consultorio por culpa de las cervicales y terminando por la lumbagia”.
En el caso de los niños, los dolores de espalda pueden aparecer por llevar de manera inadecuada el morral escolar y por el exceso de peso, por eso lo ideal son los bolsos con rueditas.
Tratamiento conservador
Díaz Martínez explica que más del 90% de los pacientes que llegan a consulta con un dolor cervical o lumbar se curan con el tratamiento conservador, que incluye medicación, reposo y terapia física. Los pacientes que no responden a esta terapia son los que suelen ir a cirugía.
El médico explica que cuando el dolor no cede antes de tratamientos convencionales, y antes de ordenar una intervención quirúrgica, es necesario hacer una evaluación completa al paciente, a través de la cual se puede apreciar antecedentes y sintomatología presente. El examen físico en el que se verifica el aspecto neurológico también es básico en este tipo de chequeos. “Según los síntomas apunten hacia un dolor axial o un dolor compresivo se orientan los exámenes diagnósticos, que pueden ir desde radiografías dinámicas hasta resonancia magnética, donde se pueden percibir detalles de tejidos blandos como son los discos intervertebrales”, explicó Díaz Martínez.