9 de cada 10 personas hipertensas no tienen bien controlada su enfermedad

La hipertensión arterial es la afección más frecuente en occidente. El 30 por ciento de la población adulta la presenta y entre los mayores de 65 años, el porcentaje asciende a 60.

Además, hay un elevadísimo grado de subdiagnóstico. El accidente cerebrovascular es la complicación más común entre los pacientes hipertensos.

Hoy lunes, con el objetivo de aumentar el conocimiento que la población tiene sobre esta enfermedad, se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión Arterial. “Esta fecha es una oportunidad inmejorable que tenemos para recordarle a la comunidad los riesgos que presenta esta enfermedad y, sobre todo, para contribuir a la concientización sobre la importancia de tomar los recaudos necesarios. Modificando el estilo de vida y siguiendo el tratamiento indicado por el especialista, éste es hoy uno de los factores de riesgo que podemos controlar con más facilidad”, sostuvo el Dr. Guillermo Fábregues, Vicepresidente de la Fundación Cardiológica Argentina.

La hipertensión arterial es una enfermedad que consiste en el cambio de la estructura de la pared arterial. “Es asintomática, por lo que se conoce como el asesino silencioso. No obstante, lo que realmente ‘mata’ es la falta de información y de conciencia acerca la gravedad de esta enfermedad. Se calcula que un 70 por ciento de quienes padecen hipertensión, no lo sabe. Entre los que sí son conscientes de su condición, sólo la mitad se hace ver por su especialista y, entre ese grupo, muy pocos luego siguen el tratamiento como el médico les indica”, afirmó el Dr. Fábregues.

Se considera que una persona tiene hipertensión arterial cuando después de controles reiterados de la presión arterial, ésta es igual o mayor de 140/90 mm Hg o “14/9″ (mm Hg milímetro de mercurio es la unidad de medida para la presión arterial). La presión arterial de una persona adulta se considera controlada cuando es menor o igual a 120/80 mm Hg o “12/8″. “Es importante destacar que no se puede hacer el diagnóstico de hipertensión ni determinar su severidad con una toma aislada de presión arterial”, explicó Fábregues.

El paciente hipertenso raramente presenta su enfermedad en forma aislada sino que, por lo general, tiene otros factores de riesgo cardiovascular. Los más importantes son el colesterol elevado LDL (o colesterol “malo”), la diabetes, el sobrepeso, el tabaquismo, el sedentarismo y los antecedentes familiares de hipertensión arterial. Junto con el colesterol elevado y el tabaquismo, es el principal factor de riesgo para el desarrollo de enfermedad coronaria (infarto de miocardio o angina de pecho).

“Para controlar los valores de hipertensión arterial, lo principal e irreemplazable es modificar el estilo de vida. Éste es el secreto para ser globalmente sano. En este sentido, se recomienda realizar caminatas prolongadas o sumatorias de una hora por día, cuatro veces a la semana. Se discute si genera el mismo beneficio caminar durante una hora de corrido o hacerlo en tres intervalos de veinte minutos, pero se sabe que lo importante es que la persona camine”, especificó el Dr. Daniel La Greca, miembro del Comité Ejecutivo de la Fundación Cardiológica Argentina.

“Asimismo, les decimos a los pacientes que no fumen, que lleven una dieta baja en sal, rica en fibras, granos, vegetales y, fundamentalmente, que baje de peso”, agregó La Greca.

Aunque a veces la causa se desconoce, existe un componente genético o hereditario que provoca que una persona la desarrolle en algún momento de su vida. Este riesgo aumenta aún más cuando ambos padres son hipertensos. En un pequeño porcentaje la causa es secundaria a algunas enfermedades del riñón, las glándulas suprarrenales y algunos medicamentos. Finalmente, una causa importante es el consumo excesivo de alcohol.

La Hipertensión en la Mujer
Datos estadísticos de los Estados Unidos sostienen que el 52 por ciento de las mujeres mayores de 45 años presentan hipertensión arterial.

Esta enfermedad es responsable del 70 por ciento de los accidentes cerebrovasculares en las mujeres. Presentarla, les aumenta en un 30 por ciento el riesgo de sufrir un infarto de miocardio y les sextuplica la posibilidad de desarrollar insuficiencia cardíaca.

Mi presión es nerviosa
El Dr. Fábregues describió también la concepción que el hipertenso tiene acerca de su condición: “Cuando uno le pregunta al paciente ¿cuál cree que es la causa de su hipertensión?, la respuesta casi siempre es la misma: ‘mi presión es nerviosa’. Lamentablemente, ésta es la creencia de la gran mayoría de los pacientes hipertensos y los lleva a pensar que la hipertensión se debe a un estado emocional y no a lo que realmente es: una enfermedad de la pared arterial con engrosamiento de su capa muscular (hipertrofia vascular).

Los cambios anatómicos que genera la hipertrofia vascular hacen que la presión de una persona hipertensa llegue a valores muy elevados en caso de una situación de estrés. Si dos personas sufren una misma situación de estrés, mientras que la persona normal presenta una elevación leve de su presión (su arteria es normal), la persona hipertensa presenta “un pico de presión arterial” (secundario a su pared arterial enferma). El estrés es similar en ambos, la diferencia está en las arterias. Como conclusión, el Dr. Fábregues destacó que “toda persona debería conocer su presión arterial, ya que controlándola, se pueden evitar grandes complicaciones”

Recomendaciones del Consejo Argentino de Hipertensión Arterial
El Dr. Marcos Marín, Director del Consejo Argentino de Hipertensión Arterial de la Sociedad Argentina de Cardiología, recordó los 10 principales consejos para mantener bien controlada la presión arterial. Ellos son:

  • Controle su presión arterial
  • Ud. debe saber que la hipertensión arterial es una enfermedad
  • Usted debe controlar la hipertensión
  • Sepa que en general la causa de esta enfermedad es conocida
    Mantenga un peso adecuado
    Camine diariamente
    Reduzca el consumo de sal
    Controle otros factores de riesgo
    Elimine el cigarrillo. Cuídese del alcohol
    Tome los medicamentos indicados por su médico
    No abandone el tratamiento.